sábado, 5 de julio de 2014

Día internacional del cooperativismo-“Una herramienta válida para un Proyecto Educativo Institucional”


El primer sábado del mes de julio de cada año se celebra el día internacional del cooperativismo. En 1923 el Comité Ejecutivo de la Alianza Cooperativa Internacional, fundada en 1895 en Londres, Inglaterra, recomendó conmemorar un día internacional del cooperativismo. 
El día Internacional de las cooperativas implica el reconocimiento a esas entidades como un factor indispensable para el desarrollo económico y social de los estados. El cooperativismo halla sus orígenes recientes en 1844 cuando un grupo de obreros ingleses reunió sus intereses en forma legal (el primer almacén cooperativo en Rochdale), con autoimposición de reglas basadas en la solidaridad.
Una cooperativa es un medio de colaboración mutua, una asociación voluntaria de personas y no de capitales con personería jurídica y responsabilidad limitada cuyo objetivo principal es el servicio hacia el socio y no el lucro aunque propende a la generación de beneficios para todos. Un ejemplo histórico es el de las cooperativas agrarias.
 El cooperativismo es una ideología, una forma de vida, no una manera de obtener ganancias especulativamente (esta es la diferencia fundamental con otro tipo de sociedades). El día internacional del cooperativismo es también el día de sus principios regentes: la adhesión voluntaria y abierta, gestión democrática, participación económica de los socios, autonomía, independencia, educación, fomación, información, cooperación intercooperativas e interés por la comunidad en general. Estos ideales de paz y unidad se plasman en su bandera color arco iris en bandas horizontales que simbolizan su carácter universal y pluralista. El rojo relativo al amor entre las personas y el fuego vital; el naranja de un amanecer; amarillo por el sol y el calor que también brinda el cooperativismo a las personas; el verde de esperanza; el azul celeste es la ilusión, pieza elemental del cooperativismo que con cada nueva empresa la lleva inserta; el azul marino es la representación del valor de los cooperativistas; el violeta simboliza la humildad. Lo mismo sucede con el emblema: el árbol de pino símbolo de vida, de inmortalidad y de fecundidad traducidos en perennnidad, perseverancia y solidaridad, nortes del cooperativismo. Los dos pinos unidos representan la hermandad dentro de un círculo de eternidad. El día internacional del cooperativismo es el día de la lucha contra la pobreza dado que estas entidades son una herramienta fundamental contra ella.
En América este principio tuvo acogida legal; en Argentina en la ley 20337, en Brasil la ley 5764, en Paraguay la ley 349, en Uruguay la ley 10761, en Chile la ley de cooperativas, etc. A nivel supranacional se ha propuesto la Ley Marco para las Cooperativas de America Latina, producto de tres congresos continentales de derecho cooperativo, muchas jornadas y seminarios convocados por la Organización de las Cooperativas de América (OCA). El día internacional del cooperativismo es el día del reconocimiento de estas sociedades como piezas elementales del andamiaje mundial de lucha contra la pobreza y la marginación.
El mismo considera a la persona como el eje fundamental del funcionamiento organizacional, lo que representa un cambio rotundo respecto del modelo basado en el viejo paradigma, trasladando el poder al colectivo e incorporando a las personas en la gestión de las empresas. El modelo busca maximizar la integración del trabajador en el proyecto empresarial y social, dotando a la persona de significado, de decisión y acción, extendiendo su ámbito de participación hacia el trabajo, la gestión, el capital y los excedentes.
Este conjunto de Personas en Cooperación debe sostenerse mediante un Proyecto Compartido (Visión, Misión y plan estratégico) que los contenga y, a la vez, potencie el deseo de aportar sus conocimientos y capacidades en pos del desarrollo y crecimiento de la cooperativa.
Es por ello que el modelo promueve estructuras organizacionales más horizontales, más planas, en las cuales las jerarquías tradicionales son suplantadas por unidades autoorganizadas con sentido, propietarias de procesos lo más completos posibles y con condiciones que permiten su autogestión a partir del ejercicio del liderazgo compartido y participativo.
 El ser humano se manifiesta como un ser en relación, capaz de establecer sistemas de vínculos que producen, simultáneamente, modificaciones en sí mismo, en los otros seres humanos y en su entorno. Además, en tanto ser en situación, es capaz de ser comprendido de acuerdo con ese mundo concreto. Entre dos personas, en grupos pequeños, en una institución, en una nación, se evidencian numerosas redes de conexiones que ponen de manifiesto el carácter vinculante de las conductas Humanas. Este ser en relación se halla hoy situado en el contexto de los procesos simultáneos - y a veces contradictorios- de democratización, mundialización, planetarización, integración, globalización, regionalización, polarización, marginación, discriminación y exclusión.
 Incorporar el Cooperativismo al ámbito de la escuela presupone la puesta en marcha de una alternativa que propicia escenarios y espacios para el tratamiento de ciertos contenidos que se relacionan con el desarrollo social y educativo de la escuela, en el marco de cada Proyecto Institucional. Se pretende promover nuevas acciones en torno a la Educación Cooperativa , así como recuperar y reorientar las que ya vienen desarrollándose en el sistema Educativo, para poder avanzar en el cumplimiento de lo establecido al respecto por la Ley de Educación Nacional Nº 26.206 , expresa en su artículo 90 que “El Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología promoverá, a través del Consejo Federal de Educación, la incorporación de los principios y valores del Cooperativismo  en los procesos de enseñanza-aprendizaje y la capacitación docente correspondiente.
La Visión de la educación está fundada en la solidaridad democrática presente en las relaciones interpersonales; de ahí que el cooperativismo  constituya una invitación al trabajo mancomunado y solidario de docentes, estudiantes y comunidad. Adquieren, al mismo tiempo, especial relevancia como movimientos cuyos sistemas responden a una filosofía que tiene por esencia la asociación de personas, con base en el esfuerzo propio y ayuda mutua, sustentando con libertad, justicia y solidaridad la satisfacción de necesidades económicas, culturales y sociales, a partir de una organización (cooperativas o mutuales) sin intención de lucro, en pro de la calidad de vida y la dignidad humana ateniéndose rigurosamente a sus principios. La Constitución Provincial en su artículo 76º establece que el Estado “difundirá el pensamiento y la educación cooperativista, mutualista y asociativista” y en su artículo 260º dice que “Los lineamientos curriculares para cada nivel educativo obligatorio, integrarán, de manera transversal, educación con: cultura, derechos humanos, culturas ancestrales, cooperativismo y mutualismo.”El cooperativismo es una auténtica expresión de democracia y una escuela práctica para el ejercicio de las virtudes cívicas. Porque la democracia es más que la forma de gobierno: es una manera de vivir. Y las instituciones políticas en que se proyecta solo se vigorizan y perduran en cuanto se las practica por todos los sectores de la sociedad”. 

Ayala Augusto
Tco Superior en Cooperativismo y Mutualismo
Lic. en Calidad de Gestión de la Educación.



No hay comentarios:

Publicar un comentario